UN SÁBADO MUY LARGO... 2

Volvemos de S. Vicente con una sensación agridulce. Los de Toñete sacaron su partido adelante, supieron correr y conseguir canastas fáciles. Dulce. Por nuestra parte hemos estado cerca. Esta vez demasiado cerca. Dulce. Pero otra vez nos ha faltado calma y tranquilidad cuando jugábamos para ponernos arriba. Agrio. Empezamos fríos. Fríos en ataque, como si nos diese miedo ir para dentro, como si nos costase hacer lo que sí hacemos en los entrenamientos. Fríos en defensa, porque permitimos demasiado, porque les dabamos demasiadas segundas oportunidades y porque la presión no presionaba, más bien nos desinflaba. Agrio. Empezamos a correr, empezamos a defender, empezamos a robar y a entrar en el partido. Robar, correr y encestar. Dulce. Llegamos a estar a -1 con posesión del balón... pero balón perdido. Otra vez se iban en el marcador y otra vez nos tocaba empezar a remar contracorriente. Llegó el último cuarto y otra vez se nos desvanecía un partido entre los dedos. Agrio. Al final 56-51... Muy agrio.

Llego al vestuario y veo cabezas bajas, algunas de decepción, otras de resignación. Tampoco lo han hecho tan mal, tampoco es para tanto, pero tres derrotas seguidas es mucho para este fantástico grupo. Se nota mejoría, se nota que están madurando. Se nota el trabajo de los entrenos, pero ha llegado el momento de poner la guinda.

En el autobús no se nota la algarabía de la ida, salvo por los infantiles. En el fondo hay silencio, decepción, la de la canasta fallada, la del pase que no llegó, la del rebote que se escapó. Mientras en la parte de alante, en mi cabeza lo que hemos hecho bien, para seguir por ahí, y lo que no se ha hecho bien, para trabajarlo más. También la búsqueda del plus que nos falta y que podemos conseguir, porque tengo la sensación de que este equipo está ahí, apunto de eclosionar, apunto de empezar a ganar. Pienso en ir hacia arriba, en animar a los jugadores y a mí mismo... Llegamos a Badajoz, el siguiente bus nos espera... ¡y todavía no nos hemos bajado de este!. En 30 minutos para Moraleja. ¿Toñete, al McDonalls? Venga! Nos vamos a almorzar.